Desestimada la demanda de Dogecoin contra Elon Musk tras el drama de la subida del verano

Una demanda colectiva que acusaba al multimillonario Elon Musk de manipular el precio de Dogecoin ha sido oficialmente desestimada, cerrando un capítulo legal de alto perfil en el espacio de la criptomoneda. La demanda, iniciada por un grupo de inversores de Dogecoin, afirmaba que las declaraciones públicas y los tweets de Musk inflaron artificialmente el precio de la memecoin, causando pérdidas a algunos operadores.
Presentado ante un tribunal federal de Manhattan, el caso fue desestimado el 29 de agosto, con las mociones finales de ambas partes retiradas a principios de noviembre. El juez de distrito Alvin Hellerstein señaló en su sentencia que las declaraciones de Musk -como la promesa de enviar Dogecoin "a la luna" en una misión de SpaceX- eran "aspiraciones y fanfarronadas", no motivos para un litigio por fraude de valores.
El meteórico ascenso de Dogecoin y la influencia de Musk
La demanda se derivó de la espectacular subida de Dogecoin en el verano de 2021, cuando su precio se disparó de menos de 0,10 dólares a 0,70 dólares, en gran parte influenciado por los tuits de Musk y su aparición en *Saturday Night Live*. Los inversores alegaron que Musk cronometró sus declaraciones públicas para manipular el valor de la moneda, participando en operaciones con información privilegiada para beneficiarse de las oscilaciones de precios. Sin embargo, Musk y Tesla negaron poseer carteras vinculadas a operaciones sospechosas y afirmaron sistemáticamente que nunca vendieron Dogecoin.
Dogecoin cotiza actualmente a 0,36 dólares y su capitalización de mercado ha aumentado hasta los 53.000 millones de dólares, lo que la convierte en la sexta mayor criptomoneda. Los analistas atribuyen esta subida a un sentimiento alcista más amplio en el mercado de activos digitales y a la renovada atención prestada a Dogecoin tras la cobertura mediática de Musk.
Dogecoin, creada como una parodia en 2013 por los ingenieros de software Billy Markus y Jackson Palmer, se ha convertido en una potente criptomoneda con una comunidad leal. El propio Musk ha abrazado los orígenes humorísticos de la moneda, declarando: "Me gusta Dogecoin porque tiene el mejor sentido del humor: son perros y memes, y me encantan esas cosas."
De cara al futuro, la trayectoria de Dogecoin dependerá de las tendencias generales del mercado y de los proyectos impulsados por la comunidad. Aunque la desestimación de la demanda aporta claridad legal, la impredecible influencia de Musk en Dogecoin y otras criptodivisas sigue siendo un comodín en el volátil ecosistema del mercado.
Mientras tanto, las ballenas de Dogecoin acumulan 140 millones de DOGE.