Vinculan a Elon Musk con el diseño de los aranceles globales de Trump, lo que desata especulaciones

Elon Musk, muy conocido por su papel en Tesla y SpaceX, se atribuye ahora el mérito de ser el artífice de la última oleada de aranceles mundiales del presidente Donald Trump.
Musk desempeñó un papel clave en el cálculo de los porcentajes de los aranceles utilizando cifras de déficit comercial, un método que contrasta fuertemente con el enfoque favorecido por el ex asesor económico Peter Navarro. Los nuevos aranceles, que afectarán a prácticamente todas las grandes economías, han suscitado una gran controversia. Musk, que ha mantenido un perfil público bajo respecto a su implicación, instó recientemente a la creación de una zona de libre comercio sin aranceles entre Estados Unidos y Europa. Su propuesta iba dirigida al viceprimer ministro de Italia, Matteo Salvini, durante una comparecencia por videoconferencia, en la que también abogó por aumentar la movilidad de los trabajadores entre ambas regiones, informa Cryptopolitan.
Influencia, críticas e implicaciones en el mercado
La influencia de Musk en la administración de Trump ha crecido desde que comenzó a asesorar desde el llamado Departamento de Eficiencia Gubernamental (D.O.G.E.), un montaje temporal financiado por sus propias contribuciones a la campaña de Trump. Aunque Musk apoya públicamente la estrategia arancelaria, su papel no ha estado exento de críticas. Mark Cuban desafió directamente el enfoque de Musk en las redes sociales, cuestionando si los aranceles protectores eran necesarios dada la fuerza del capital privado y los incentivos gubernamentales. Cuban también advirtió de que la agresiva política arancelaria, diseñada para forzar a la Reserva Federal a bajar los tipos de interés hundiendo la economía, podría resultar contraproducente avivando aún más la inflación.
Ahora que se espera que Musk abandone su papel de asesor de la Casa Blanca tras su mandato de 130 días, el debate sobre su impacto duradero en la política comercial estadounidense está lejos de terminar. Mientras la Administración sigue adelante con sus planes arancelarios, los observadores del mercado y los responsables políticos vigilarán de cerca si el proyecto de Musk puede sostener el crecimiento económico sin desencadenar una espiral inflacionista prolongada.