La República Checa planea eximir de impuestos las criptomonedas mantenidas durante más de tres años

La República Checa está dando un gran paso para convertirse en un país favorable a las criptomonedas con una propuesta legislativa para eximir del impuesto sobre plusvalías las tenencias de criptomonedas a largo plazo. El primer ministro Petr Fiala anunció el 6 de diciembre que los residentes checos no tendrían que pagar impuestos sobre los activos digitales vendidos después de haberlos tenido durante más de tres años.
Además, la nueva ley simplificará la declaración de impuestos para las transacciones más pequeñas. Las criptotransacciones inferiores a 100.000 coronas (unos 4.200 dólares) anuales ya no tendrán que declararse a las autoridades fiscales, lo que elimina una importante carga administrativa. "Esto significa que, por ejemplo, comprar café con Bitcoin [...] ya no será una transacción fiscal", explicó Fiala en un comunicado.
Parte de un esfuerzo europeo más amplio de regulación de las criptomonedas
La medida, encabezada por el miembro de la Cámara de Diputados Jiří Havránek y aprobada tras una lectura parlamentaria el 6 de diciembre, se alinea con el marco regulador de los Mercados de Criptoactivos (MiCA) de la Unión Europea. Un portavoz del Gobierno subrayó la importancia de esta legislación para fomentar un entorno favorable para las criptoempresas en la República Checa.
"Se trata de un paso importante para garantizar que el sector de las criptomonedas pueda prosperar y seguir creciendo en nuestro país", declaró el portavoz durante una rueda de prensa.
La iniciativa checa contrasta con las políticas más estrictas de tributación de las criptomonedas en otros países. Por ejemplo, Estados Unidos grava las plusvalías con impuestos que oscilan entre el 15% y el 20%, en función de los ingresos. Mientras tanto, Italia se ha enfrentado a la controversia sobre los planes para aumentar los impuestos a las criptomonedas hasta el 42% para las ganancias superiores a 2.000 euros, aunque los legisladores están considerando ahora una tasa reducida del 28%.
Al introducir normas fiscales más laxas, la República Checa podría posicionarse como un centro para la innovación y la inversión en criptomonedas, atrayendo potencialmente a empresas y particulares que buscan un entorno normativo más favorable.
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