Las acciones de Intel ponen a prueba el soporte principal mientras los inversores esperan una posible ruptura

A 8 de abril de 2025, Intel Corporation (NASDAQ: INTC) cotiza a 19,57 dólares, lo que supone un descenso del 1,64% respecto al cierre anterior.
Esto continúa una tendencia bajista más amplia que comenzó a mediados de 2024, cuando la acción cotizaba por encima de 35 dólares. En las últimas 52 semanas, INTC ha oscilado entre 18,51 y 45,41 dólares, lo que refleja una volatilidad sustancial en medio de los cambios en la confianza de los inversores, las presiones competitivas y los esfuerzos de reestructuración interna. El precio actual se sitúa cerca del extremo inferior de este rango, lo que pone a los inversores en alerta por si se produce una ruptura o un rebote desde estos niveles.
Desde el punto de vista técnico, el nivel de 19,00 dólares es una zona de soporte clave. Se ha puesto a prueba varias veces desde finales del primer trimestre de 2025 y se ha mantenido, lo que sugiere una posible formación de un fondo. Si se rompiera este soporte, el siguiente objetivo bajista importante estaría en el rango de 17,50 $-18,00 $, donde la acción se estabilizó por última vez durante los mínimos de principios de 2023.
Dinámica de la cotización de INTC (febrero de 2025 - abril de 2025). Fuente: TradingView.
La resistencia se sitúa cerca de 26,00 $, alineada con la media móvil simple (SMA) de 50 semanas y una línea de resistencia horizontal que se formó a partir de múltiples repuntes fallidos en la segunda mitad de 2024. Un cierre por encima de este nivel podría marcar una ruptura técnica y allanar el camino hacia la barrera psicológica de los 30,00 $, que también coincide con la SMA de 200 días.
Contexto y evolución del mercado
La industria de semiconductores en general sigue en constante cambio, influida por la geopolítica, la demanda impulsada por la inteligencia artificial y la reestructuración de la cadena de suministro. Intel ha emprendido iniciativas para recuperar su ventaja competitiva, especialmente frente a rivales como AMD y Nvidia. Uno de los acontecimientos más vigilados es el acuerdo estratégico con Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC), que podría implicar el uso compartido de capacidad o la concesión de licencias tecnológicas. Aunque aún no se ha concretado, la posible colaboración supone un giro importante en el enfoque de Intel sobre las operaciones de fundición.
Intel también ha realizado cambios de liderazgo que han captado la atención del mercado. El nombramiento de Lip-Bu Tan, un respetado veterano de los semiconductores, como Consejero Delegado se ha considerado un movimiento estratégico para guiar a la empresa en su transformación. Bajo su liderazgo, los inversores esperan una ejecución más sólida de las ambiciones de fundición de Intel y posiblemente una postura más colaborativa dentro del ecosistema mundial de chips.
A la incertidumbre se añade el telón de fondo macroeconómico. Con el enfriamiento de la inflación y la pausa en las subidas de los tipos de interés, el capital está empezando a fluir de nuevo hacia los sectores de crecimiento de alta tecnología. Sin embargo, los inversores mantienen la cautela, especialmente en los valores de semiconductores que están experimentando transiciones en su modelo de negocio o afrontando riesgos de ejecución.
Escenarios de precios
Durante las próximas cuatro a seis semanas, es probable que las acciones de Intel se mantengan en un rango de entre 19 y 26 dólares, salvo que se produzca algún anuncio que cambie las reglas del juego. Si se confirma el acuerdo con TSMC y las condiciones son favorables -especialmente si mejoran la escala de fabricación de Intel o reducen su carga de capex-, los inversores podrían revalorizar rápidamente las acciones hacia el nivel de 30 $.
En el escenario alcista, una ruptura por encima de los 26 $ con confirmación de volumen podría hacer que INTC volviera a alcanzar los 30 $ a principios de verano. En un escenario neutral, INTC se consolidaría en el rango actual, especialmente si el resultado de TSMC sigue siendo especulativo. Un resultado bajista, impulsado por unas débiles previsiones de beneficios o una ruptura de las negociaciones con TSMC, podría llevar a la acción por debajo de los 19 $, con un objetivo de 17,50 $ o menos.
Las acciones de Intel han bajado tras la concesión de 7.900 millones de dólarespara financiar la Ley CHIPS, por debajo de los 8.500 millones previstos. El déficit ha suscitado la preocupación de los inversores sobre la capacidad de Intel para ampliar sus operaciones de fundición con la rapidez suficiente para competir a escala mundial.