Las acciones de Nvidia caen por debajo de los 100 dólares
El contexto macroeconómico general sigue pesando sobre la confianza en los semiconductores.
A 9 de abril de 2025, Nvidia Corporation (NASDAQ: NVDA) cotiza a 96,30 dólares, lo que supone un modesto descenso intradía del 0,89%.
Esto se produce después de un período de gran volatilidad, durante el cual la acción rompió brevemente por encima de la marca de $ 100 antes de revertir a la baja. Técnicamente, Nvidia opera dentro de un rango de consolidación. El soporte inmediato se sitúa en torno a los 90 dólares, un nivel psicológico que se ha puesto a prueba en múltiples ocasiones durante las dos últimas semanas. Este nivel se ha mostrado resistente y puede actuar como suelo para los descensos a corto plazo. Al alza, la resistencia se está formando en torno a los 105 $, una zona en la que los movimientos alcistas del precio se han estancado sistemáticamente.
La media móvil simple de 50 días tiende actualmente a la baja, lo que refleja una tendencia bajista a corto plazo. A esto se suma el hecho de que el precio de las acciones cotiza por debajo de las medias móviles de 20 y 50 días, lo que sugiere una falta de impulso comprador a corto plazo. Sin embargo, la media móvil de 200 días se mantiene plana o ligeramente alcista, lo que indica una perspectiva neutral a ligeramente alcista a largo plazo. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) se acerca al umbral de 30, que tradicionalmente indica condiciones de sobreventa. Si el RSI sigue cayendo, podría atraer a los compradores técnicos que anticipan un rebote de los precios.
Dinámica de la cotización de NVDA (febrero de 2025 - abril de 2025). Fuente: TradingView.
El histograma MACD sigue en territorio negativo, pero existe la posibilidad de un cruce alcista si aumenta el interés comprador. Los niveles de volumen se han situado ligeramente por encima de la media en las últimas sesiones, especialmente durante las ventas, lo que indica que los recientes descensos se están enfrentando a una participación sustancial.
Contexto del mercado y evolución reciente
El contexto macroeconómico y geopolítico general sigue pesando sobre la confianza en los semiconductores. Las recientes escaladas en el conflicto comercial entre Estados Unidos y China han reavivado los temores de interrupciones en la cadena de suministro. La administración Trump ha aplicado un arancel del 104% a las importaciones chinas, y Pekín ha respondido con un arancel del 84% a los productos estadounidenses. La escalada de tensiones plantea preocupaciones sobre la seguridad del suministro a largo plazo y los patrones de la demanda mundial, especialmente porque China es un importante consumidor de chips.
Ante esta incertidumbre, la confianza de los inversores sigue siendo dispar. En particular, el fondo ARK Innovation ETF (ARKK) de Cathie Wood se ha mostrado favorable a Nvidia, con la compra de unas 343.657 acciones durante dos días consecutivos. Este movimiento sugiere confianza en las perspectivas a largo plazo de Nvidia a pesar de los riesgos a corto plazo. Los principales segmentos de negocio de Nvidia -especialmente en inteligencia artificial, GPU para juegos y computación en centros de datos- siguen siendo sólidos. El dominio de la compañía en las tecnologías de aceleración de IA y aprendizaje profundo le proporciona un foso competitivo que pocos rivales pueden desafiar.
Los resultados siguen siendo un catalizador fundamental. El próximo informe de resultados de Nvidia se analizará con lupa para conocer las actualizaciones sobre la demanda en sus segmentos de IA e infraestructura en la nube, así como los comentarios de la dirección sobre los riesgos geopolíticos.
Escenarios de precios
A corto plazo, es probable que las acciones de Nvidia se mantengan en un rango de entre 90 y 105 dólares, salvo que se produzcan noticias o acontecimientos macroeconómicos importantes. Una ruptura por encima de la resistencia de 105 dólares podría abrir la puerta a una prueba del rango de 110-115 dólares, especialmente si se ve respaldada por unos buenos resultados o por el alivio de las tensiones geopolíticas. Sin embargo, si persiste el impulso bajista y el valor rompe por debajo del nivel de soporte de 90 $, es cada vez más probable que vuelva a probar los 85 $.
Los operadores deben mantener la cautela y seguir de cerca la evolución del comercio mundial y los anuncios de beneficios. Los fundamentales de Nvidia siguen siendo sólidos, pero los indicadores técnicos sugieren la posibilidad de una mayor debilidad a corto plazo antes de cualquier movimiento alcista sostenido. En general, aunque la volatilidad a corto plazo puede continuar, la narrativa a largo plazo de Nvidia permanece intacta para los inversores con una alta tolerancia al riesgo.
La reciente debilidad de Nvidia está impulsada más por riesgos macroeconómicos y políticos que por factores técnicos, con renovadas amenazas arancelarias bajo la retórica comercial de Donald Trump que aumentan la preocupación de los inversores. Aunque los semiconductores aún no se han visto directamente afectados, los posibles aranceles sobre los componentes chinos podrían perturbar la cadena de suministro de Nvidia y presionar sus márgenes.
