Las acciones de Nvidia suben hasta los 117 dólares por el alivio de las tensiones entre EE.UU. y China sobre los chips

A 8 de mayo de 2025, Nvidia (NASDAQ: NVDA) cotiza a 116,99 $, lo que refleja una modesta ganancia diaria del 1,02%. Sin embargo, el panorama técnico general sigue siendo bajista.
El valor ha formado recientemente una "cruz de la muerte", un patrón técnico en el que la media móvil de 50 días (127,39 $) ha caído por debajo de la media móvil de 200 días (127,73 $). Esta formación se considera una señal de riesgo a la baja para el valor, y suele reflejar un cambio en el sentimiento de los inversores, que pasan de alcistas a bajistas. El valor cotiza actualmente por debajo de sus medias móviles de 50 y 200 días, lo que pone de manifiesto la falta de impulso alcista.
Además, la acción del precio de Nvidia está confinada dentro de un canal descendente, una estructura que generalmente sugiere una tendencia bajista persistente. Los vendedores han dominado el mercado, empujando los precios a la baja, y cada intento de rebote se ha topado con una nueva presión vendedora. Se han identificado niveles de soporte clave para Nvidia en los 96 $ y los 87 $. Estos niveles son críticos porque si no se mantiene el soporte en los 96 $, podría desencadenarse un rápido descenso hacia el siguiente soporte principal en los 87 $. Al alza, la resistencia es visible en 115 $ y 130 $.
Dinámica de la cotización de NVDA (marzo 2025 - mayo 2025). Fuente: TradingView.
Si la cotización de Nvidia logra superar los 115 $ con un fuerte volumen, podría apuntar a la marca de los 130 $. Sin embargo, dado el entorno técnico bajista, cualquier recuperación podría enfrentarse a una resistencia considerable. Los operadores deberían vigilar el índice de fuerza relativa (RSI), que actualmente se sitúa por debajo de 40, lo que indica que el valor se acerca a territorio de sobreventa. Aunque una situación de sobreventa puede desencadenar a veces un rebote a corto plazo, la tendencia bajista general y los riesgos geopolíticos podrían limitar cualquier recuperación.
Contexto del mercado: tensiones geopolíticas y competencia
Los retos actuales de Nvidia no son únicamente técnicos, sino que también están profundamente arraigados en la dinámica geopolítica y del mercado. La reciente decisión del Gobierno de Estados Unidos de imponer restricciones más estrictas a las exportaciones de chips a China ha afectado directamente a las perspectivas de crecimiento de Nvidia. Nvidia, que tiene una presencia significativa en el mercado chino, se enfrenta ahora a una situación compleja en la que uno de sus mayores mercados podría ser cada vez más difícil de acceder.
Además, los informes de que el gigante tecnológico chino Huawei está desarrollando un chip de IA competidor han añadido más incertidumbre a Nvidia. Este hecho es significativo porque sugiere que el dominio de Nvidia en el mercado de chips de IA podría verse desafiado no solo por competidores estadounidenses, sino también por empresas tecnológicas chinas emergentes. Los inversores están muy atentos a los planes de Nvidia para defender su cuota de mercado en medio de esta creciente competencia.
Además de las preocupaciones geopolíticas, Nvidia se enfrenta a la volatilidad del mercado en general. El sector tecnológico ha visto fluctuar sus valoraciones a medida que los inversores sopesan el impacto de la subida de los tipos de interés y la ralentización del crecimiento económico. La exposición de Nvidia a los sectores de alto crecimiento de la inteligencia artificial (IA) y los centros de datos es un arma de doble filo. Aunque se trata de mercados en rápida expansión, también son muy competitivos, y cualquier desaceleración de la demanda puede tener un impacto desproporcionado en los resultados financieros de Nvidia.
Previsión de precios de NVDA: perspectiva prudente
Dada la combinación de debilidad técnica y presiones externas, se espera que las acciones de Nvidia sigan bajo presión a corto plazo. Si la acción no logra mantener el nivel de soporte crítico de 96 $, es posible un descenso hacia el siguiente soporte de 87 $. Este movimiento podría desencadenarse por una continua presión vendedora, noticias negativas en torno a las relaciones entre EE.UU. y China o nuevos acontecimientos en el panorama competitivo.
Por el contrario, una ruptura clara y sostenida por encima de la resistencia de 115 $ podría proporcionar a Nvidia cierto impulso alcista. En este escenario, la acción podría apuntar a los 130 $, que sirve como nivel de resistencia más significativo. Sin embargo, para que este escenario alcista se materialice, Nvidia probablemente necesitaría catalizadores positivos, como desarrollos regulatorios favorables, un fuerte rendimiento de las ganancias o una respuesta estratégica a la creciente competencia.
La apuesta de Nvidia por las soluciones basadas en IA para vehículos autónomos y juegos refuerza sus perspectivas de crecimiento. El informe de resultados del 28 de mayo, que se espera que arroje un beneficio por acción de 0,89 dólares y unos ingresos de 43.120 millones de dólares, podría desencadenar una ruptura por encima de la resistencia.