El índice del dólar retrocede por debajo de 102 en medio de un sentimiento comercial mixto y preocupaciones por el IPC

El índice del dólar estadounidense (DXY) experimentó una fuerte subida tras el anuncio del presidente Trump de una pausa arancelaria de 90 días para 56 países y la Unión Europea.
La pausa se ha percibido como una posible desescalada de las tensiones comerciales, lo que impulsó temporalmente el sentimiento del mercado. Esto proporcionó una base para que el índice del dólar subiera y pusiera a prueba la resistencia de 50 EMA en 102,80, un nivel clave que resultó difícil de superar.
Como consecuencia de la resistencia, esta subida fue efímera. Hoy, jueves 10 de abril, el DXY ha vuelto a caer por debajo de 102,00 y cotiza a 101,55, lo que supone un descenso de más del 1%. El precio se está acercando a un mínimo de cuatro días a medida que se acerca a un soporte crítico en 101,46. El RSI, tanto en el gráfico diario como en el de 4 horas, se encuentra en territorio bajista, lo que refuerza las perspectivas de nuevos descensos a corto plazo.
Dinámica del precio del dólar estadounidense (abril de 2025). Fuente: Tradingview
Los datos del IPC podrían cambiar la postura de la Fed y debilitar potencialmente al dólar
Mientras el índice del dólar retrocede, la atención de los operadores se centra ahora en el próximo informe del Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Estados Unidos, que se publicará el jueves a las 12:30 GMT. Se espera que las cifras del IPC de marzo muestren un ligero enfriamiento de la inflación, y se prevé que la tasa anual caiga del 2,8% de febrero al 2,6%. Se espera que el IPC subyacente, que excluye los alimentos y la energía, baje al 3% desde el 3,1%. Estas cifras serán objeto de un atento escrutinio, ya que podrían influir considerablemente en las expectativas en torno a la política de la Reserva Federal y las futuras decisiones sobre los tipos de interés.
Si los datos del IPC se sitúan por debajo de las expectativas, las perspectivas para el dólar podrían debilitarse aún más, sobre todo si se alimenta la especulación de que la Reserva Federal podría adoptar una postura más pesimista. Por otra parte, si la inflación resulta ser más sólida de lo previsto, podría dar un breve respiro al dólar, ya que una mayor inflación podría incitar a la Reserva Federal a actuar de forma más agresiva.
En conclusión, el índice del dólar estadounidense encontró una importante resistencia en 102,80 y ha retrocedido por debajo de 102,00. Una ruptura por debajo de 101,46 podría indicar un nuevo retroceso. Sin embargo, la publicación del IPC del jueves será el principal catalizador que influirá en la trayectoria del dólar a corto plazo.
El índice del dólar rompió por debajo de una línea de tendencia alcista, cayendo a mínimos de tres días. La debilidad técnica y la tensión geopolítica provocaron el descenso.