El índice del dólar cae por debajo de 99,1 mientras los operadores se preparan para los datos de ventas minoristas de Estados Unidos
El DXY cae a 99,0; los datos minoristas, en el punto de mira
El índice del dólar estadounidense (DXY) está perdiendo tracción por debajo del umbral de 100, a medida que se produce un agotamiento técnico y los operadores sopesan los principales riesgos macroeconómicos.
Tras superar el martes un patrón de triángulo convergente a corto plazo, el movimiento se estancó justo antes del nivel psicológico de 100, alcanzando un máximo de 99,9 a última hora de la sesión norteamericana.
En la sesión asiática del miércoles, el DXY había retrocedido un 0,7%, alcanzando un mínimo de 99,0 puntos. La caída del precio rompió por debajo del mínimo del martes de 99,10 y cambió el sentimiento a corto plazo a favor de los vendedores. Durante la sesión europea, el índice se recuperó ligeramente y cotizó en torno a 99,30, aunque siguió registrando una leve pérdida diaria del -0,46%.
Dinámica de precios del DXY (marzo 2025 - abril 2025). Fuente: Tradingview
En el gráfico de 4 horas, la EMA de 20 periodos actúa como resistencia a corto plazo en 99,7. Mientras tanto, el RSI ha caído a 37,8, un nivel típicamente asociado con el control bajista. Si la presión bajista se mantiene, la zona de soporte de 98,50 será el próximo objetivo probable.
Las políticas comerciales debilitan el sentimiento mientras los operadores se preparan para las ventas minoristas en EE.UU.
El sentimiento en torno al billete verde es cada vez más frágil, ya que los participantes del mercado siguen cuestionando el atractivo a largo plazo del dólar tras los erráticos anuncios relacionados con los aranceles del presidente Trump. La falta de claridad en la política comercial ha nublado las perspectivas y ha hecho que el posicionamiento de riesgo sea más defensivo.
La atención se centra ahora en los datos de ventas minoristas estadounidenses de marzo, que se publicarán hoy a las 12:30 GMT. Las expectativas apuntan a un fuerte repunte del 1,3% frente al 0,2% anterior, lo que aumenta la volatilidad intradía del dólar. Un resultado negativo podría acelerar el impulso bajista, mientras que una fuerte sorpresa podría ayudar a estabilizar el DXY justo por encima del nivel de 99,0. Hasta entonces, la acción de los precios refleja dudas sobre la evolución del DXY. Hasta entonces, la evolución de los precios refleja más indecisión que convicción.
El índice del dólar estadounidense permaneció atrapado en un patrón de triángulo convergente tras caer por debajo de 100 puntos. Los operadores esperaban una ruptura, con la vista puesta en un rebote hacia 100 o una caída hacia 98,5.
